Son Sant Jordi, situado en el corazón de un pintoresco pueblo, ofrece una experiencia única de alojamiento en una casa restaurada con esmero, transformada en un encantador hotel familiar. Este establecimiento se distingue por su perfecta combinación de tradición y confort, donde cada rincón ha sido cuidado para preservar el carácter histórico del edificio mientras se proporcionan las comodidades modernas. La atención al detalle y al servicio personalizado es palpable desde el momento de la llegada, haciendo que los huéspedes se sientan inmediatamente como en casa. El hotel se enorgullece de su hermoso jardín, un oasis de tranquilidad que invita a los visitantes a relajarse bajo el sol mediterráneo. La típica terraza mallorquina, adornada con flores locales y vegetación exuberante, ofrece el escenario perfecto para disfrutar de momentos de paz o de agradables cenas al aire libre. Es aquí donde la esencia de la vida mallorquina se hace más palpable, permitiendo a los huéspedes sumergirse en la atmósfera relajada y acogedora que caracteriza a este lugar. En cuanto a las comodidades, Son Sant Jordi no deja nada al azar. El acceso Wi-Fi gratuito en las zonas comunes asegura que los huéspedes puedan mantenerse conectados con el mundo exterior, aunque se encuentren en un refugio de tranquilidad. Además, el restaurante del hotel es un verdadero deleite para los sentidos, ofreciendo una selección de platos locales e internacionales preparados con ingredientes frescos de la región. Es una oportunidad ideal para degustar la gastronomía mallorquina, conocida por su sabor y calidad. La combinación de su ubicación privilegiada, el encanto de sus instalaciones, y el calor humano de su servicio, hacen de Son Sant Jordi el lugar ideal para quienes buscan una escapada tranquila y llena de encanto. Ya sea para explorar los pintorescos alrededores, disfrutar de la hospitalidad local o simplemente relajarse en un ambiente sereno y acogedor, este pequeño hotel familiar promete una estancia inolvidable en el corazón de Mallorca.
En el Hotel Rural Son Sant Jordi, se recomienda a los clientes contactar al hotelero unos días antes de su llegada para informar sobre la hora de llegada. El complejo consta de un edificio principal y edificios anexos ubicados entre 50 y 100 metros de distancia entre sí. Todas las instalaciones y servicios, como la recepción, el restaurante, la piscina y las zonas comunes, se encuentran en el edificio principal. Es importante tener en cuenta que los edificios anexos no disponen de ascensor, por lo que aquellos con dificultades de movilidad pueden requerir alojamiento en el edificio principal para mayor comodidad.
Ca'n Cuarassa se encuentra en una zona aislada, tiene 1400 metros de extensión y 15 metros de ancho y su nivel de ocupación es medio. Puedes acceder fácilmente a pie. A 27,6 kilómetros podemos encontrar el Hospital Comarcal D'Inca y a 3,4 kilómetros se encuentra el Reial Club Náutic Port de Pollença.