Brisa Marina es un complejo exclusivo que ofrece una experiencia inigualable para aquellos que buscan el equilibrio perfecto entre el lujo y el contacto con la naturaleza. Situado en una ubicación privilegiada, este complejo se compone de ocho villas de primera clase, diseñadas para proporcionar la máxima comodidad y privacidad a sus huéspedes. Cada villa está meticulosamente equipada para satisfacer todas las necesidades y deseos de quienes se alojan, asegurando una estancia memorable. Las villas de Brisa Marina destacan por su elegante decoración y su ambiente acogedor, donde el confort se une a la funcionalidad. Cada unidad cuenta con su propia piscina privada, ofreciendo un oasis de tranquilidad y un refugio perfecto para relajarse bajo el sol. La terraza amplia y bien equipada se convierte en el escenario ideal para disfrutar de momentos inolvidables, ya sea tomando el sol en las cómodas tumbonas, disfrutando de una comida al aire libre en la mesa con sillas, o simplemente relajándose bajo la sombra de las sombrillas. Pensando en los amantes de la gastronomía al aire libre, Brisa Marina ha incluido en cada villa una parrilla completa, ideal para preparar deliciosas comidas y disfrutar del arte del asado en la privacidad de su terraza. La zona ajardinada que rodea cada piscina y terraza añade un toque de belleza y serenidad al entorno, creando un paisaje perfecto para desconectar y sumergirse en la paz que ofrece este lugar único. Además de las comodidades de cada villa, Brisa Marina se enorgullece de su compromiso con el servicio de excelencia, asegurando que cada momento de su estancia sea perfecto. Desde la recepción hasta el momento de la despedida, el equipo de Brisa Marina está dedicado a cumplir con cada una de las expectativas de sus huéspedes, haciendo de su visita una experiencia inolvidable. Este complejo no es solo un lugar para alojarse, es un destino que promete convertir cada visita en un recuerdo imborrable.
Brisa Marina es un encantador complejo de villas situado en una de las zonas más apacibles de Playa Blanca, en Lanzarote. Su ubicación privilegiada lo coloca muy cerca de la playa y de la bulliciosa zona turística, lo que permite a los huéspedes disfrutar de la tranquilidad y la comodidad a la vez. Además, las impresionantes playas de Papagayo, parte de una reserva natural protegida, se encuentran a tan solo dos kilómetros de distancia, ofreciendo aguas cristalinas y paisajes espectaculares para explorar. Playa Blanca, además de brindar hermosas vistas de Fuerteventura y Lobos, cuenta con una amplia variedad de lugares de interés cercanos que hacen de este destino un lugar ideal para unas vacaciones inolvidables. A poca distancia del hotel, los huéspedes pueden disfrutar de restaurantes, tiendas y bares en el centro de Playa Blanca, así como explorar el encantador paseo marítimo que ofrece vistas panorámicas del océano Atlántico. Asimismo, la cercanía a las playas de Papagayo brinda la oportunidad de practicar deportes acuáticos, hacer senderismo o simplemente relajarse en la arena dorada bajo el cálido sol canario.
Todas las villas cuentan con tres dormitorios, dos baños y un salón-comedor con televisión y radio. Las cocinas están muy bien equipadas con horno, microondas, nevera, hervidor de agua, cafetera, tostadora. Las viviendas disponen, además, de lavadora, plancha y caja fuerte.
Iglesia de reciente construción dedicada a Nuestra Señora del Carmen, patrona de los marineros.