Este hotel tiene 2 plantas en las que se reparten un total de 22 habitaciones. Ofrece a sus huéspedes una recepción, abierta las 24 horas del día, una cafetería muy acogedora y un salón con televisión....
Pancar, una pequeña localidad situada en el corazón de Asturias, España, es un rincón lleno de encanto que muchos viajeros aún no han descubierto. Este pintoresco pueblo es el destino perfecto para aquellos que buscan escapar del bullicio de las grandes ciudades y sumergirse en la tranquilidad de la naturaleza, la rica historia y la cultura asturiana.
Un bello ejemplo de la arquitectura religiosa local que data del siglo XVIII, donde se pueden admirar impresionantes piezas de arte sacro. No muy lejos de allí, se encuentra el Puente Romano, un testimonio de la antigua ingeniería que aún hoy sigue en pie, ofreciendo unas vistas espectaculares del río que atraviesa el pueblo.
Para los amantes de la naturaleza, Pancar es un punto de partida excepcional para explorar los senderos que se adentran en el Parque Nacional de los Picos de Europa, un paraíso para los senderistas, con rutas que revelan paisajes de montañas imponentes, bosques densos y una fauna variada.
Aparte de su belleza natural, Pancar ofrece una inmersión en la cultura asturiana a través de su gastronomía. No puedes irte sin probar la fabada asturiana en alguno de los restaurantes locales, donde se sirve este plato tradicional con todo el sabor y la autenticidad de la cocina casera.
En resumen, Pancar es un destino que sorprende por su riqueza natural, histórica y cultural, ideal para quienes buscan experiencias auténticas lejos del turismo masivo.
Visitar Pancar, un encantador rincón de Asturias, es una experiencia enriquecedora en cualquier época, pero resplandece especialmente desde la primavera hasta el otoño. Entre mayo y octubre, el clima se muestra amable, con temperaturas agradables que permiten explorar sus verdes paisajes y disfrutar de sus festividades locales. La primavera trae consigo el despertar de la naturaleza, mientras que el otoño pinta de colores cálidos los bosques, creando escenarios mágicos. Lo menos conocido es que, durante estos meses, Pancar se convierte en un lugar idóneo para los amantes del senderismo y la fotografía, gracias a sus paisajes poco explorados y su luz especial.
Pancar, un pintoresco rincón de Asturias, ofrece un clima templado con veranos suaves e inviernos frescos, ideal para los amantes de la naturaleza. Sorprendentemente, esta área disfruta de una peculiaridad climática: la bruma matutina que adorna sus valles, creando paisajes de ensueño, especialmente durante la primavera y el otoño.
Pancar, una encantadora localidad en el corazón de Asturias, es un tesoro escondido de tradiciones y celebraciones.
Este pintoresco rincón asturiano se engalana especialmente durante la "Fiesta de San Pelayo", patrón del pueblo, donde las calles se llenan de color, música y devoción. Los visitantes pueden disfrutar de procesiones, música folclórica y, por supuesto, la exquisita gastronomía local. Además, Pancar sorprende con sus actos culturales como pequeñas ferias de artesanía y encuentros de casas rurales, que promueven el talento y la creatividad de sus habitantes. Un destino que, sin duda, ofrece una experiencia inolvidable en cada visita.
Los hoteles en Pancar, Asturias, se destacan por su encanto y calidez, reflejando la belleza natural y la tranquilidad de la región. Rodeados de impresionantes paisajes verdes y montañas, estos alojamientos ofrecen una experiencia única, combinando la hospitalidad tradicional asturiana con comodidades modernas. Los visitantes pueden esperar encontrar desde acogedoras casas rurales hasta elegantes hoteles boutique, todos diseñados para proporcionar una estancia relajante y rejuvenecedora.
El costo de alojamiento en Pancar varía según la temporada, el tipo de hotel y los servicios ofrecidos. En general, los precios son bastante accesibles, con opciones para todos los presupuestos. Durante la temporada baja, es posible encontrar habitaciones dobles en hoteles encantadores por precios que comienzan desde los 50 euros por noche. Para aquellos que buscan una experiencia más lujosa, los precios pueden ascender a 100 euros o más, dependiendo de las comodidades exclusivas y las vistas espectaculares que se ofrecen.