Hotel Pensión Casa Do Relojero (A Coruña / La Coruña)

Pensión Casa Do Relojero es un encantador alojamiento situado en el corazón del pequeño y sereno pueblo de Zas, que es la capital del municipio homónimo. Con una población de alrededor de 800 habitantes, este establecimiento promete una experiencia de estancia tranquila y acogedora. Ubicado justo al lado de la iglesia parroquial de San Andrés de Zas, ofrece a sus huéspedes la oportunidad de sumergirse en la vida cotidiana de este pintoresco rincón de Galicia, disfrutando de la paz y la belleza del entorno rural gallego. La Pensión Rustica Casa Do Relojero se caracteriza por su cuidada decoración y ambiente cálido, características que invitan a relajarse y disfrutar de la estancia. Con un total de 5 habitaciones dobles, cada una equipada con baño propio, y una habitación individual con baño compartido, este lugar se adapta tanto a viajeros solos como a parejas que buscan una escapada romántica o un retiro tranquilo. Entre las habitaciones dobles, dos cuentan con dos camas individuales de 0.90 cm, mientras que las tres restantes disponen de una cama de matrimonio de 1.35 cm, ofreciendo diversas opciones según las necesidades de los huéspedes. Además de las cómodas instalaciones para dormir, la Pensión Casa Do Relojero ofrece la posibilidad de añadir una cama supletoria en una de las habitaciones, lo que la convierte en una opción versátil para familias pequeñas o grupos de amigos que deseen explorar la región juntos. La atención al detalle y el esfuerzo por garantizar la comodidad de los visitantes se refleja en cada rincón de la pensión, asegurando que cada estancia sea memorable y única. Rodeada de la tranquilidad del campo gallego y con una ubicación privilegiada para descubrir los encantos de la región, la Pensión Casa Do Relojero es el punto de partida ideal para aventurarse por los senderos naturales, visitar monumentos históricos o simplemente disfrutar del ritmo pausado de la vida en Zas. La hospitalidad de sus anfitriones y el ambiente acogedor hacen que los huéspedes se sientan como en casa, prometiendo una experiencia auténticamente gallega que invita a volver.