Atraviesa las puertas del Sleeping Belle Hotel y vive una estancia atípica entre culturas y épocas. Este establecimiento encarna la autenticidad del estilo Art Deco, trayendo de vuelta el frenesí de los locos años veinte. Cerca de los monumentos de París y de la impresionante torre del reloj de la Gare de Lyon, Sleeping Belle es el lugar ideal para combinar ocio y trabajo. Su fácil acceso a los distintos barrios es lo que hace famosa a esta casa, donde se unen el encanto, la convivencia y la exclusividad. La Bella Durmiente, un destino fascinante para dejar las maletas...
Se encuentra a solo 700 metros de la plaza de la Bastilla, en el este de París, y a 3 minutos a pie de la estación de trenes Gare de Lyon. Ofrece habitaciones con baño y conexión WiFi gratuita. A 15 minutos a pie de la catedral de Notre Dame y a 700 metros de la línea 1 de metro, con acceso directo al Museo del Louvre, los Campos Elíseos y el distrito de negocios de La Défense.
Individuales, dobles, triples o cuádruples, las habitaciones son genuinamente parisinas y están acondicionadas para aprovechar el espacio. Los tonos rojos de moquetas, cabeceros y cortinas combinan con mesillas de vidrio y aluminio cepillado, escritorios afines y pantallas planas. Cuentan también con baño privado y wi-fi.
En su centro se alza la colonne de Juillet, coronada por el famoso Génie de la Liberté, que conmemora la revolución de 1830. Pero la plaza es muy conocida por otra revolución: la de 1789. En esta época, el lugar estaba ocupado por la prisión de la Bastille, símbolo del poder absoluto del Ancien Régime. De esta prisión, destruida después de la Revolución Francesa, no queda nada. Hoy en día, la plaza sirve de marco para grandes eventos populares – conciertos, ferias, marchas ciudadanas – y de punto de encuentro ineludible para los noctámbulos que frecuentan los bares y restaurantes de los alrededores, sobre todo los de la rue de la Roquette.