Entrar a Mansión Alcázar, es ingresar a una casona tradicional cuencana de finales del siglo XIX. Su arquitectura de antaño evoca la vida Republicana de una ciudad declarada Patrimonio Cultural de la Humanidad. La decoración interior evoca el estilo de principios de siglo, con una cuidadosa selección de exquisitos muebles y objetos de arte que embellecieron en otra época los salones más lujosos de la ciudad. La pérgola en el jardín invita a escapar del ruido de la ciudad, a disfrutar de una comida al aire libre. Viva la experiencia del Té en las Tardes del Alcázar, o una deliciosa copa de vino al caer la tarde.
Habitaciones confortables con una decoración con finas antigüedades y un especial con televisión, caja de seguridad, teléfono de discado internacional, baño, amenities y secador de cabello.
Ambiente de estilo inglés que le ofrece la posibilidad de disfrutar de una cafetería gourmet, tragos preparados por personal altamente calificado y bocaditos para acompañar la bebida elegida.
Un espacio clásico decorado con finos objetos de arte y con capacidad para 26 personas. Equipado con plaques de peltre, cubertería de plata, platos de vidrio artesanal, tapetes tejidos a mano y copas de cristal, hacen de este ambiente un espacio único en la ciudad. Cada mañana ofrece desayuno Americano, o a la carta. En los menús encontrarán la mejor cocina ecuatoriana e internacional, con platos especialmente preparados por el chef.