Este elegante y exclusivo hotel es una verdadera obra de arte de la arquitectura, del siglo XVIII, con una preciosa fachada, una suntuosa decoración interior y un atento y magnífico servicio. Tiene seis plantas en las que se reparten un total de 160 habitaciones, 51 de ellas elegantes suites. Ofrece a sus huéspedes una preciosa terraza, un patio interior con terraza, una sala para tomar el té y varios salones. Entre las particularidades del hotel están el restaurante Les Ambassadeurs, que recibió un premio, el restaurante L'Obélisque y un acogedor bar con piano.
Este encantador hotel se oculta tras una preciosa fachada, al lado del pomposo edificio del Ministerio de la Marina, en la plaza de la Concordia, el mismo corazón de París. En los alrededores podrá encontrar una gran cantidad de monumentos, así como la elegante avenida Faubourg St. Honoré, los Campos Elíseos y los grandes museos. Enfrente del hotel hay una parada de transporte público.
Todas las habitaciones han sido equipadas de forma moderna y para ofrecerle el máximo confort. Cuentan con un cuarto de baño con secador de pelo, albornoz y chancletas. Además, disponen de teléfono de línea directa, televisión vía satélite y por cable, conexión a Internet, minibar-nevera, aire acondicionado y caja fuerte de alquiler.
Todas las mañanas se ofrece a los clientes desayuno.
La Plaza de la Concorde se ubica al pié de la Avenida de los Champs-Elysées. Se distingue hoy por el obelisco de Louxor (de una antigüedad de 3300 años antes de Cristo y erigido en mayo 1998), por los prestigiosos hoteles que la bordean y por las dos fuentes monumentales ((Fontaine des Mers y Fontaine des Fleuves). Creada en 1772, la Place de la Concorde fué primero conocida por haber sido el lugar de ejecución durante la Revolución Francesa. Louis XVI y Marie-Antoinette (entre otros) fueron guillotinados allí. Es entre 1836 y 1846 que el arquitecto Jacques-Ignace Hittorf ha diseñado la plaza para convertirla en la que conocemos hoy en día.