Casa de indianos del siglo XIX, de recias formas, rehabilitada escrupulosamente para tratar de conseguir un ambiente de época, al mismo tiempo que una confortabilidad a la altura de las buenas instalaciones hoteleras.
Consta de cinco espaciosas habitaciones dobles, con amplio baño completo, calefacción y TV en color.
Aparcamiento dentro de la instalación. Amplio jardín cerrado sobre sí en piedra y forja , con árboles centenarios.
Dispone de un servicio de desayunos y cenas, así como carta de vinos, cerveza, refrescos y licores
Basilica de Santa Maria